A finales del siglo 19 vibraba en la plaza Askanischer Platz la vida de gran ciudad. El monumental edificio de la estación, también llamada la "Puerta al Sur", ha sido durante mucho tiempo uno de los principales centros de transporte de Berlín y lugar representativo del Imperio Alemán, como también telón de fondo de la propaganda nazi. Desde aquí salian los trenes a Viena, Roma y Atenas; desde aquí agentes voluntarios de Hitler deportaron a 9600 ciudadanos judíos, en el campo de concentración Theresienstadt y los campos de exterminio en Europa del Este. Hoy sólo la ruina del pórtico de ladrillo y un parque con rieles tornados en caminos, dan cuenta de la estación bombardeada parcialmente durante la Segunda Guerra Mundial Anhalter Bahnhof.
En la antigua "estación madre de ferrocarriles" “Mutterhöhle der Eisenbahnen” (Walter Benjamin) se encuentra actualmente un campo de fútbol y el Tempodrom. La arquitectura en forma de carpa contiene una arena de conciertos y el Liquidrom, que con piscinas termales promete un placentero baño urbano. Algunas partes de la estación fueron remodeladas para el Centro de Ciencia y el Museo Alemán de Tecnología, visible desde lejos por un Rosinenbomber (avión bombardero de pasas) sobre el edificio.
Frente a Anhalter Bahnhof se encontraba entre los años 1913 a 1954 el Excelsior. Con 600 habitaciones, un spa subterráneo, una biblioteca y túneles conectados a las plataformas, el hotel era con razón uno de los más ostentosos del continente.
Hoy sólo el rascacielos de diecisiete pisos rememora por su nombre al gran hotel bombardeado en la Segunda Guerra Mundial.
Entre Prinz-Albrecht-Straße (ahora Niederkirchnerstraße), Wilhelmstraße y Anhalter Straße se encontró de 1933 a 1945 el centro de control de las políticas represivas y criminales nazis. En este lugar histórico, en el que se concentraron el cuartel general de la Policía Secreta del Estado (Gestapo), el servicio de seguridad de la SS y, tras 1939, la Oficina Central de Seguridad del Reich; gobernaba el terror del régimen nazi. Desde el año 1987 la exposición permanente “Topographie
des Terrors” (Topografía del terror) documenta e informa sobre las dimensiones del aparato homicida nazi. De las instalaciones del bunker y los túneles en torno a Anhalter Bahnhof aún se puede visitar el enorme Reichsbahnbunker con paredes de dos metros de espesor, el cual actúa hoy como
“Gruselkabinett” (gabinete del horror).
No sólo la historia de Alemania ha dejado en este lugar intrincadas huellas. Justo enfrente de Clemens-Höfen, donde se encuentra el Hostal, hay un trozo del muro de aduanas y accisa de Berlín, que sustituyó a la muralla medieval y fue construida a partir del siglo 18 para controlar el comercio.
En los portones de 18 pulgadas se recaudaron accisa (antiguos impuestos directos sobre bienes importados), además de evitar el contrabando de mercancías, así como el escape de los soldados de la guarnición de Berlín. El antiguo muro que dividió Berlín Oriental y Occidental 28 años, corría 200 metros al norte del Hostal. Llamada en la RDA "frontera estatal fortificada", tenía como objetivo principalmente a la prevención de la fuga de los habitantes de la República. Diagonal a la Cámara de Diputados de Berlín (ex Landtag prusiano) hay restos de muro, de la "muralla de protección antifascista", para admirar. No muy lejos de aquí cantó David Bowie en el Hansa Studios en Meistersaal, „the big hall by the wall“, su éxito "Heroes".
El entorno del hostal Three Little Pigs es un oasis para el esparcimiento cultural. En Stresemannstrasse se abre hace más de 100 años el telón del Teatro Hebbel, actualmente uno de los escenarios más importantes de teatro contemporáneo en Berlín. La singular construcción en zigzag del museo judío, diseñado por el arquitecto Daniel Libeskind en el estilo del deconstructivismo, alberga dos milenios de la historia alemana-judía y exposiciones periodicas sobre arte y cultura cotidiana.
La Galería de Berlín, como "Museo Nacional de Arte Moderno, Fotografía y Arquitectura", se encuentra en una zona residencial, en la que esculturas e instalaciones preparan a los visitantes a una experiencia única. El museo intenta combinar artefactos históricos significativos con la escena contemporánea creativa: así el visitante se encuentra con "Dada y Fluxus, Nueva Objetividad y el Expresionismo, los Rusos en Berlín, la Vanguardia en la Arquitectura y la Fotografía, Berlín bajo la Esvástica, la ciudad en ruinas, Berlín Este y Berlín Oeste" y Metrópoli después de la unificación.
El mito internacionalmente conocido del distrito de Kreuzberg se basa no sólo en los proyectos alternativos, que surgieron a la sombra del muro y gracias a la coexistencia pacífica, sino también en las batallas por ocupar casas hace 30 años y las luchas callejeras entre Autónomos, agitadores y la policía cada primero de mayo desde 1987. Enfrente de la Willy-Brandt-Haus (Centro Federal del partido Socialdemócrata de Alemania) se puede encontrar hoy aun un último vestigio de proyectos autónomos de izquierda del movimiento de oposición no parlamentaria: el hogar Tommy Weissbecker es desde marzo de 1973 un residencial colectivo autónomo, que fue creado como protesta contra las politicas de vivienda y renovación urbana de Berlin, y que recuerda a uno de los proyectos menos alternativos entre las casi 100 tomas en Kreuzberg en los ‘80.